sábado, 21 de noviembre de 2015

RCP BÁSICA EN ADULTOS

La parada cardiorespiratoria (PCR) se define como la interrupción brusca, inesperada y potencialmente reversible, de la actividad mecánica del corazón y de la respiración espontánea. Ante una PCR el paciente cae inconsciente, no se mueve, no responde a nuestras llamadas y puede que no tenga pulso. El corazón deja de latir y la sangre no llega a los tejidos.

Un paciente en PCR necesitará por lo tanto una maniobra de RCP, que nos ayudará a mantenerlo con vida y poder evitar cualquier daño cerebral que esta parada ocasione hasta que llegue la ambulancia.
Si nos encontramos ante esta situación, llamaremos inmediatamente al servicio de emergencia 112. Si hay alguien más a nuestro alrededor podemos pedirle su colaboración, puede que la necesitemos.
  1. Colocaremos a la víctima en posición de RCP: tumbado boca arriba sobre una superficie dura.
  2. Realizaremos la maniobra-frente mentón y abriremos la vía aérea.
  3. Descubrimos el pecho de la víctima y seguimos las costillas flotantes hasta el punto donde se unen con el esternón. Mediremos tres dedos más abajo sobre su extremo inferior y es en ese lugar donde realizaremos las compresiones.
  4. Colocaremos los brazos rectos sobre el tórax de la víctima, aprovechando el peso de nuestro cuerpo para realizar las compresiones. La palma de la mano la pondremos encima del esternón y la otra mano encima de ésta, entrelazando los dedos de ambas.
  5. A continuación comenzaremos con las compresiones que tendrá una profundidad de entre 4 y 5 cm. El número ideal es de 100 por minuto. Por cada 30 compresiones, realizaremos 2 insuflaciones.
Cada dos minutos comprobaremos si la víctima recupera la respiración o el pulso, de no ser así continuaremos con las compresiones hasta que llegue la ayuda especializada.

Si la víctima responde y comienza a respirar por su cuenta, suspenderemos las maniobras y lo colocaremos en posición de seguridad (posición lateral) y esperamos a que llegue la ambulancia sin movernos de su lado.

Esperamos que os sirva de ayuda. No hace falta ser un especialista para realizar una RCP, recuerda que con estos sencillos pasos puedes salvar muchas vidas!

Os dejamos este vídeo en donde podéis ver lo que os acabo de contar:


Y si no, también podéis echarle un vistazo a estas páginas:


TIPOS DE SHOCK Y ACTUACIÓN

Ahora que ya conocemos lo que es el shock o estado de choque, debemos conocer los mecanismos que pueden llegar a provocarlo, entre los que destacan el shock hipovolémico, anafiláctico, neurogénico y cardiognénico 
Para comenzar, el shock hipovolémico es la disminución del volumen de sangre. Se produce como consecuencia de una pérdida de líquido de origen gastrointestinal, renal, fiebre elevada y falta de aporte hídrico.
Por otro lado, la anormal distribución de la sangre es otro de los mecanismos que lo provocan y se encuentra en dos casos: shock anafiláctico o neurogénico. El anafiláctico es consecuencia de una alergia exagerada ante un antígeno, su presencia provoca la liberación de sustancias vasoactivas que alteran la permeabilidad capilar tanto a nivel sistémico como a nivel pulmonar. Además, provoca vasodilatación generalizada disminuyendo así la presión arterial y una vasoconstricción coronaria que causa isquemia miocárdica.
 Sin embargo, El neurogénico es resultado de una lesión del sistema nervioso simpático, es decir, las funciones simpáticas del cuerpo se interrumpen lo que conduciría a una relajación de los vasos sanguíneos disminuyendo así el flujo de sangre.
Para terminar, nos encontramos con el shock cardiogénico que se debe a un fallo cardíaco, como sucede en el infarto de miocardio, siendo necesario para provocar el shock el 40-50% de la necrosis en la masa ventricular izquierda. 

ACTUACIÓN FRENTE A UN ESTADO DE CHOQUE O SHOCK
¿Qué harías si te encontraras a una persona en shock? 
Lo primero y más importante es avisar a los servicios de emergencia, proporcionar los datos precisos de la víctima y su situación.

Se debe controlar el pulso y la respiración. A continuación, se debe poner a la víctima en posición antishock, en decúbito supino y con las piernas elevadas unos 30cm. Se debe aflojar la ropa y evitar la pérdida de la temperatura protegiendo con una manta. Finalmente, vigilar por si aparece parada cardiocirculatoria para realizar las maniobras de RCP.


Para saber más:
http://www.medynet.com/usuarios/jraguilar/Manual%20de%20urgencias%20y%20Emergencias/shock.pdf
http://www.webconsultas.com/salud-al-dia/shock/que-hacer-en-caso-de-shock-12595

SHOCK: INTRODUCCIÓN Y ETAPAS

¿Qué entendemos por shock? El shock es un estado en el que entra el cuerpo cuando no recibe el aporte suficiente de sangre. Por lo tanto, el oxígeno necesario para el funcionamiento de los órganos es escaso provocando un fallo multiorgánico.
Esta afección es grave, ya que, en caso de no auxiliar al afectado los daños pueden ser irreparables, incluso llegan a producir la muerte del individuo.

Por lo mencionado, será primordial reconocer lo síntomas y las etapas de este tipo de afección. Aunque existen diferentes orígenes, cuando el cuerpo entra en estado de shock hay una serie de síntomas generales:
- Presión arteria baja: acompañada de un pulso muy débil y rápido.
- El afectado siente ansiedad, agitación y temblores.
- Presencia de cianosis, es decir, mucosas, labios y uñas de color azulado. Se produce por el bajo nivel de oxígeno en el organismo.
- Escalofríos: la piel está húmeda y pálida con sudoración abundante.
- Respiraciones lentas y superficiales: también puede ocurrir en el caso contrario, rápidas y profundas lo que dará lugar a hiperventilación.
- Síntomas neurológicos: mareos, vértigos, desmayos e incluso pérdida de conocimiento.
- Dolor torácico y dificultad para respirar.

El desenlace de un evento del shock cuenta con cuatro etapas,  inicial, compensatoria, progresiva e irreversible.
Durante la etapa inicial, la circulación está afectada Pero las desviaciones que se producen no son de gran magnitud de manera que no se produce disfunción. Sin embargo, en la etapa compensatoria la circulación está gravemente afectada. Por lo tanto se activan los mecanismos de compensación que tiene como fin conservar la presión arterial y fomentar el riego sanguíneo hacia los órganos vitales.

Por otro lado, si se alcanza la etapa progresiva existe un gran disturbio homeostático ya que los mecanismo de compensación no logran conservar la circulación causando un desiquilibrio fisológico grave a causa de la falta de riego. Finalmente, si el shock no ha podido ser tratado a tiempo nos encontramos en la etapa irreversible. En esta el estado de la víctima se deteriora con rapidez causando la muerte.

Por último, como ya se ha mencionado el shock tiene diferentes orígenes como la pérdida de sangre a causa de traumatismos y quemaduras graves, congelación, reacciones alérgicas  y fallos cardíacos. En resumen, causas que provocan el déficit de oxígeno en el organismo.

Saber más:
http://www.saludmed.com/primerosauxilios/contenido/shock.html

ACTUACIÓN FRENTE A FRACTURAS Y LUXACIONES

Una fractura es la pérdida de la continuidad normal de la sustancia ósea. Es una discontiniudad en los huesos a consecuencia de golpes, fuerzas o tracciones cuya intensidad supera la elasticidad del hueso.

Existen diferentes tipos de fracturas atendiendo a dos criterios:

Dependiendo de si el puto de fractura se comunica o no con el exterior se clasifican en:

- Cerrada: si la punta de la fractura no se asocia a ruptura de la pil, o si hay herida, esta no comunica con el exterior.
- Abierta o expuesta: si hay una herida que comunica el foco de fractura con el exterior, facilitando en paso de microorganismos patógenos provenientes de la piel o del exterior.

Según su ubicación en el hueso se clasifican en:

- Fractura epifisiaria: ocurre en el tejido óseo esponjoso del extremo articular de un hueso, epífisis, que es normalmente lugar de inserción de la cápsula articular y de ligamentos estabilizadores de la articulación.
- Fractura diafisiaria: tiene lugar en la diáfisis ósea que suelen ser lugares de poca irrigación sanguínea.
- Fractura metafisiaria: se encuentra en la metáfisis ósea que son zonas bien irrigadas.

Otros tipos de fracturas son:















Los principales signos y síntomas que se presentan son:

- Dolor ( hasta shock neurogénico).
- Impotencia funcional.
- Deformación.
- Pérdida de los ejes.
- Equimosis.
- Crépito óseo.
- Movilidad anormal.
- Hemorragia ( hasta shock hipovolémico).

Si nos encontramos ante una situación en la que la víctima a sufrido una fractura, lo primero que debemos hacer es tratar de tranquilizarla para poder ayudarla. A continuación, procederemos a retirar cualquier objeto, ya sean pulseras, relojes anillos, que se encuentren en el miembro afectado y que al hincharse puedan causar más dolor y dificultar la inmovilización del miembro. Seguidamente procederemos a la inmovilización de la zona que presenta la fractura  colocando un cabestrillo o entablillando el miembro. Se debe inmovilizar el miembro tanto por arriba como por debajo. Si se trata de una fractura abierta debemos prevenir que se infecte enjuagándola suavemente tratando de retirar todo aquello que la pueda contaminar sin frotarla demasiado. Por último la cubriremos con una gasa estéril.

Las fracturas de mayor riesgo son las que se presentan en la cabeza, columna vertebral, muslo y pelvis.

Una luxación o dislocación es toda lesión capsulo-ligamentosa con pérdida permanente de contacto de las superficies articulares por causa de un trauma grave que puede ser total (luxación) o parcial (subluxación). También puede dañar a ligamentos y nervios. Las dislocaciones generalmente son ocasionadas por un impacto súbito a la articulación y se presentan después de un golpe, caída o otro trauma 

Los síntomas que presenta son:

- Dolor agudo.
- Impotencia funcional absoluta e inmediata.
- Aumento del volumen.
- Deformidad.
- Tras la reducción se pueden producir un daño a nivel neurovascular ( compromiso del nervio axilar).
- Si no hay rotura de la capsulo-ligamentosa aparece una hemartrosis ( sangre dentro de la cavidad articular).

Ante una víctima que presenta una dislocación debemos inmovilizar la articulación afectada, aplicar hielo sobre la zona afectada para producir analgesia, reposo absoluto en la zona, trasladar a la víctima a un centro hospitalario. Bajo ningún concepto debemos de tratar de poner la articulación en su sitio.

Las articulaciones más comprometidas son: hombro, cadera, rodilla y tobillo



viernes, 20 de noviembre de 2015

ACTUACIÓN FRENTE A HEMORRAGIAS

Las hemorragias son la salida de la sangre del interior del vaso sanguíneo (arteria, vena y capilar) o del corazón.  Esta pérdida se produce por la rotura de la pared de los mismos. Podemos conocer la procedencia de la sangre dependiendo de sus características:

- Sangre arterial: este tipo de hemorragia suele ser intensa y la sangre es de color rojo vivo y sale de forma intermitente y con fuerza.
- Sangre Venosa: esta es menos intensa que la anterior, la sangre es de color rojo oscuro y sale de forma continua y persistente.
- Sangre Capilar: son poco intensas y localizadas.

 Se clasifican en tres tipos: exteriorizadas, internas y externas.

- Exteriorizadas:
-  Epistaxis: sangrado por la nariz.
Hematemesis:sangrado por la boca, en forma de vómito. Procede del esófago o estómago.
-  Melena:sangrado por el ano procedente del intestino.
- Rectorragiasangrado por el ano procedente del recto.
- Hemoptisis:sangrado por la boca procedente del aparato respiratorio. Este viene acompañado de tos.
Otorragia: sangrado por el oído.
Metrorragia:sangrado por la vagina procedente del útero de origen distinto a la menstruación.
Menorraguia: menstruación con periodo superior a 7 días.
Hematuria:sangrado por la uretra procedente del aparato urinario.

- Externa: La sangre sale directamente al exterior.
Interna: La sangre no sale al exterior acumulándose en cavidades o órganos. En este caso colocaremos al paciente en posición de trendelenburg.

Debemos saber identificar correctamente las manifestaciones generales de este tipo de lesión, ya que, es primordial para poder detectar una hemorragia interna. Además, una pérdida de 500 ml conduce a un shock hipovolémico poniendo en riesgo la vida del accidentado.
En primer lugar debemos acostarlo y abrigarlo porque la pérdida de sangre conduce a una disminución de la Temperatura corporal.

Sospecharemos de una hemorragia cuando aparecen: confusión, desorientación, mareos, piel pálida, fría y humedecida, aumento de la frecuencia cardíaca con el pulso débil y rápido, aumento de la frecuencia respiratoria y debilidad. También, estaremos atentos si manifiesta, dolor abdominal, torácico o cefalea intensa.

Las medidas a adoptar irán desde los más sencillos a los más complejos. Siguiendo este criterio realizaremos los siguientes pasos:

- Compresión directa: Consiste en efectuar una presión  con una gasa o apósito en el punto de sangrado durante 10 minutos y elevaremos la extremidad por encima del corazón. una vez transcurrido este tiempo se deja de hacer presión pero NUNCA se retira el apósito. Esta paso no se realiza en el caso de que se vea el hueso o tenga algún objeto clavado.

- Inmovilización: cuando nos encontremos ante una fractura inmovilizaremos el miembro para controlar la hemorragia.

- Compresión arterial: Esta se realiza cuando no han funcionado las dos anteriores. Consiste en presionar una arteria principal, arterial humeral (en el brazo) o femoral (en la pierna) para reducir la pérdida de sangre. Este procedimiento solo funciona en lesiones en las extremidades.

- Torniquete: esta técnica SOLO se utilizará en el caso de que las anteriores no funcionen o que haya más de un accidentado a la vez y el socorrista esté solo. Consiste en detener completamente la circulación sanguínea en el miembro afectado. Será necesario aflojarlo cada 15 minutos 


ACTUACIÓN FRENTE A QUEMADURAS

Las quemaduras son de las pocas lesiones en que la actuación puede modificar la causa del accidente, es decir, actúa sobre el origen de la afección como por ejemplo el fuego o un líquido hirviendo. De tal manera que el resultado de la lesión sea menos grave en comparación de si no se hubiera intervenido. 
Por lo que se puede definir las quemaduras como una destrucción del tejido producida por el calor, esto es a temperaturas superiores a 45 ºC.
La gravedad viene determinada por su extensión, su localización, su profundidad y el grado de resistencia de la víctima ya que los niños y los ancianos son más sensibles al calor. Por lo tanto, teniendo en cuenta esto, se clasifican en: quemaduras leves, quemaduras graves y quemaduras muy graves.
Por otro lado, se clasifica las quemaduras en tres grados, el primer grado son quemaduras superficiales, es decir, afectan a la epidermis. Se presentan con enrojecimiento y con formación de ampollas. Las de segundo grado afectan a la epidermis y además a zonas de la dermis. Se presenta con formación de ampollas, enrojecimiento, sensibilidad al aire y dolor.
Y por último las de tercer grado se caracteriza por la destrucción de la epidermis y de la dermis, son destruidas las terminaciones nerviosas por lo que cursan sin dolor.

Actuación frente a quemaduras leves:
1. Enfriar la zona quemada con agua fría
2. Si la quemaduras es de primer grado, puede aplicarse crema hidratante.
3. Quitar cinturones, relojes, y ropa que pueda presionar a la víctima
4. Si presenta ampollas y están rotas, cubrirlas con apósitos estériles. 
5. Dar de beber si la víctima está consciente pequeño sorbos de agua con sal y bicarbonato para evitar el shock.

Actuación frente a quemaduras graves y muy graves:
1. Eliminar la causa
2. Si la ropa está en llamas, cubrir a la victima con una manta y hacerla rodar por el suelo
3. Colocar a la victima en decúbito supino y valorarla 
4. Recorta la ropa donde se encuentra la lesión si está adherida a la piel
5. Cubrir la zona quemada con apósitos estériles para evitar infecciones 
6. Trasladar a la víctima, en posición lateral de seguridad 

En resumen, frente a una quemadura la actuación correcta es eliminar la causa que la provoque, refrigerar con agua, cubrir la zona quemada y trasladar a la víctima. 

Enlaces
http://www.abcmedicus.com/content/quemaduras-de-1-2-3-grado

ACTUACIÓN FRENTE A ESGUINCES


Los esguinces son lesiones muy comunes en las que se produce una torcedura, distensión o estiramiento excesivo en un ligamento, provocados por un golpe, caída o movimiento brusco, que hacen que el ligamento sobrepase su amplitud habitual. Los ligamentos son bandas de tejido elásticas y resistentes, formados por múltiples fibras, que se encargan de unir los extremos óseos de una articulación.

Los esguinces no son tan graves como una fractura o una luxación, porque como ya dijimos antes afectan al ligamento y nunca al hueso. El esguince más habitual es el de tobillo.

Se trata de lesiones que producen dolor, mucha inflamación e impiden el funcionamiento normal de la articulación afectada. La recuperación de los esguinces depende de la gravedad de los mismos.

Los esguinces pueden clasificarse en 3 grados:

  • GRADO I: El ligamento se estira, pero las fibras no llegan a romperse, o se rompen muy pocas (no se aprecia). Distensión parcial del ligamento.
  • GRADO II: Se produce una rotura parcial de las fibras del ligamento.
  • GRADO III: Rotura completa de las fibras con arrancamiento óseo.



¿Cómo tratar los esguinces?
  1. Aplicar hielo de forma inmediata. Permitirá reducir la inflamación. ¡Ojo! nunca aplicar hielo directamente sobre la piel, ya que puede producir una quemadura, lo envolveremos siempre en un trapo.
  2. La zona afectada debe permanecer inmóvil, por lo que se le realizará un vendaje elástico (nunca lo apretaremos demasiado). En caso de ser necesario, se utilizará una férula.
  3. La lesión se mantendrá elevada por encima del corazón (se reducirá la inflamación).
  4. Reposo durante varios días. No se debe aplicar presión a la zona afectada hasta que haya bajado el hinchazón.
  5. Se le podrá recetar ibuprofeno o ácido acetilsalicílico entre otros fármacos, para reducir el dolor y la inflamación.

En caso de esguinces de GRADO I el tiempo de recuperación suele ser entre 7 y 10 días, por el contrario en caso de los de GRADO III la recuperación puede tardar hasta 5 semanas.

Para la prevención de los esguinces es recomendable el uso de calzado apropiado, evitar zapatos de tacones altos, calentar los músculos antes de realizar cualquier actividad física, etc.

Para más información:
http://www.salud180.com/salud-z/recomendaciones-para-atender-esguinces
http://www.vitonica.com/lesiones/que-es-un-esguince-y-como-se-trata
http://www.definicionabc.com/salud/esguince.php


RECONOCIMIENTO DE LA VÍCTIMA

En el momento en el que se presencia un accidente lo primero que se debe realizar es tomar las medidas de seguridad y autoprotección pertinentes para evitar otros posibles accidentes. A continuación procederemos a valorar a la víctima, durante este primer reconocimiento se deben intentar identificar aquellos problemas que ponen en riesgo inminente su vida. Primeramente, se valora la respiración y el estado de consciencia.

 En el caso de que existan varias víctimas se debe realizar una rápida valoración de cada una de ellas antes de empezar a realizar cualquier maniobra particular sobre una de ellas.

Para valorar el estado de consciencia de la víctima nos colocaremos a su lado y procederemos a realizar estímulos de intensidad progresiva. Primero, comprobaremos si la persona tiene los ojos abiertos, si es capaz de responder a preguntas y moverse con normalidad, si es así la persona se encuentra alerta y consciente. Si esta tiene los ojos cerrados pero respira con normalidad la tocaremos firmemente y le hablaremos en un tono de voz elevado para que nos comunique si le pasa algo. Si la víctima no es capaz de mantener un estado de alerta normal será indicativo de que su grado de consciencia se encuentra alterado. Si la víctima no responde ante ninguno de los estímulos que se le aplican nos encontramos ante una persona inconsciente. Todo este proceso debe realizarse sin perder nunca la calma y en caso de que que exista algún tipo de alteración en el grado de consciencia de alguna de las víctimas debemos comunicarlo al 112.

La respiración es otro de los signos vitales que debemos valorar. En el caso de que la víctima se encuentre consciente valoraremos el ritmo, la profundidad y la rapidez de su respiración. En el caso de que no respire o esta sea ineficaz se debe proceder a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar.  Si la víctima se encuentra inconsciente ponemos una mano sobre su frente echando la cabeza ligeramente hacia atrás y la otra mano en la barbilla abriendo la boca, aproximamos nuestra cara a la de la víctima mirando hacia al tórax para comprobar como exhala el aire y la elevación del tórax. No se deben emplear más de diez segundos en realizar esta operación.

En el caso de que exista una hemorragia importante debemos actuar rápidamente sobre ella para intentar detener el sangrado.

En el caso de que la víctima se encuentre consciente debemos intentar que nos comunique que síntomas presenta, antecedentes médicos, como sucedió en accidente, valorar posibles fracturas u otras lesiones.






jueves, 19 de noviembre de 2015

¿CÓMO ACTUAR EN CASO DE EMERGENCIA?

Ante cualquier situación de emergencia, existen una serie de pasos que se resumen en el acrónimo PAS (proteger, alertar y socorrer), los cuales consisten en:
Proteger:
Lo más importante es la autoprotección. A continuación protegeremos al herido o a los heridos del accidente y en caso de exista algún testigo, pedir su colaboración.
Deberemos analizar el lugar para mantenernos seguros y observar cualquier peligro que pueda provocar un problema mayor.
Alertar:
En este segundo paso, deberemos llamar inmediatamente al 061 o para ser más exactos al 112. El operador que recoga la llamada desde la central, nos hará una serie de preguntas las cuales deberemos contestar con mucha claridad: ¿Dónde se ha producido el accidente exactamente? ¿Tipo de accidente? ¿Cuantos heridos hay? Para que ellos manden los equipos necesarios para solventar la situación en la que nos presentamos.
Socorrer:
Tranquilizaremos a las víctimas indicándoles que la atención especializada está de camino. En este tiempo valoraremos las lesiones de los heridos para establecer prioridades de actuación y colocaremos a las víctimas en una posición segura. No manipularemos al accidentado en caso de no saber lo que estamos haciendo.
El protocolo de actuación no es una respuesta improvisada, sino el resultado de decisiones consensuadas entre diferentes profesionales. Su objetivo es resolver la emergencia y, por tanto, tiene como punto de partida la sintomatología que presentan las víctimas, estableciendo en cada caso las prioridades oportunas.

http://cruzdelavida-lauris.blogspot.com.es/p/la-conducta-pas.html
http://fedace.org/conducta-pas-ante-un-accidente-y-los-primeros-auxilios/
http://salud.discapnet.es/Castellano/Salud/Prevencion_Riesgos/Prevencion/Paginas/Primeros_auxilios.aspx



SISTEMA INTEGRAL DE EMERGENCIAS (SIE)

Para comenzar el Sistema Integral de Emergencias ofrece sus servicios a todas aquellas personas que requieran de asistencia sanitaria inmediata. Asimismo, está formado por un conjunto de diferentes cuerpos o servicios que se activa cuando sucede una emergencia para dar una respuesta adecuada a las diferentes necesidades originadas. 
Este centro está integrado por personal formado, un sistema de comunicación y una serie de medios de transportes sanitarios para garantizar el éxito en la organización. 

Por otro lado, se incluye un sistema de Emergencias Sanitarias (SES) que se caracteriza por la accesibilidad y la rapidez ya que el tiempo es primordial. También se debe señalar tanto la efectividad como la equidad puesto que la asistencia sanitaria debe ser adecuada y de carácter universal. Este sistema incluye servicios móviles de urgencia y reanimación. Además, posee cobertura directa con los centros urbanos e indirecta en zonas rurales vecinas.

Finalmente, para acceder al sistema se realiza una llamada al 061, pero existe otra alternativa para ponerse en contacto que es realizar la llamada al 112, Pero este servicio deriva la llamada al SES que coordina y moviliza a todos los recursos sanitarios necesarios, suministra la asistencia idónea y transfiere a los pacientes a los diversos hospitales si estos lo requieren. 

Enlaces:

LEGISLACIÓN EN PRIMEROS AUXILIOS

En lo que al aspecto legal se refiere, cuando nos encontramos ante una situación de emergencia cualquier persona tiene la obligación de ayudar en lo posible a quien lo necesite. De lo contrario, estaremos cometiendo un delito, omisión del deber de socorro.

legislacion
www.mutualidad-deportistas.org/legislacion
Según el artículo 6 del Código Civil, "la ignorancia de las leyes no excusa de cumplimiento". Por lo tanto, el no socorrer a una persona en un accidente será penalizado con una pena de prisión y multa.

Además de lo expuesto anteriormente, debemos aclarar dos conceptos a la hora de intervenir en una situación de emergencia. Si no se toman las medidas de precaución necesarias y con ello empeorase el estado de la victima, el profesional cometería una imprudencia temeraria.

Sin embargo, si un socorrista actuara en una de estas situaciones y como consecuencia, apareciese o se agravase una lesión en el accidentado, podría no tener responsabilidad legal. Esto ocurre cuando se han realizado todas las medidas necesarias para evitar el daño, sin intención voluntaria por no actuar con suficiente cuidado.

Saber más:
http://www.race.es/seguridadvial/formacion-race/en-caso-de-emergencia/normativa-primeros-auxilios

INTRODUCCIÓN


Los primeros auxilios son medidas terapéuticas urgentes que se aplican a víctimas de accidentes o enfermedades repentinas hasta disponer de tratamiento especializado.

Un accidente es un supuesto imprevisto y brusco que tiene como resultado una lesión en un individuo, pudiendo incluso producir la muerte.

Una urgencia es una sensación subjetiva de demanda por parte de un individuo, que conlleva una asistencia temprana desde el momento de su aparición (menos de 6 horas).

Una emergencia es una situación que necesita una asistencia inmediata para mantener la vida del individuo y evitar secuelas graves. Requiere por lo tanto la realización de maniobras llevadas a cabo por personal especializado.

 El propósito de los primeros auxilios es aliviar el dolor y la ansiedad del herido, evitar el agravamiento de su estado, e incluso evitar su muerte hasta disponer de atención médica especializada.

Para su aplicación es necesario un previo conocimiento de las técnicas, ya que  una medida terapéutica mal aplicada puede ocasionar graves complicaciones.

Los objetivos básicos de los primeros auxilios son:

-Conservar la vida de las víctimas.
-Evitar, en la medida de lo posible, complicaciones físicas o psicológicas.
-Colaborar en la recuperación de las víctimas
-Garantizar el traslado de los accidentados.


lunes, 16 de noviembre de 2015

¿QUIENES SOMOS?

Estudiantes de enfermería en la Universidad de Santiago de Compostela. El motivo de la creación de este blog es informar a todas a aquellas personas que estén interesadas en como intervenir ante una situación de emergencia.