En los niños, las convulsiones están provocadas por el aumento de la temperatura corporal por catarros, infecciones... Reciben el nombre de convulsiones febriles y se deben a una respuesta ante la elevada temperatura. Son acontecimientos convulsivos considerados benignos. Estos episodios duran aproximadamente unos 5 minutos que consiste en las sacudidas rítmicas de las extremidades, movimientos de los ojos, no reacciona y a veces cianosis. Este episodio viene acompañada de 30 minutos de somnolencia y confusión.
Los síntomas son similares a las del adulto y suelen venir acompañadas con fiebre.
¿Cómo actuaríamos?
El protocolo es similar al de los adultos, pero además se debe tomar la temperatura de la víctima si es posible y retira la ropa e intentar enfriar al niño con un baño de agua templada o paños fríos en la frente.
Lo que no se debe hacer:
- Enfriar demasiado rápido ni bruscamente
- Ni bajar la temperatura del niño por debajo de 37ºC
Para saber más:
No hay comentarios:
Publicar un comentario